Me lleva el tren!!!

Y literalmente... me lleva el tren. A todos nos lleva el tren.

Me mandaron un mail en días pasados, en el que hacen una metáfora de la vida como un tren.

Me pareció muy interesante, pero no voy a hacer copy / paste; eso sólo aplica para trabajos de la uni... me limitaré a parafrasear y dar mi opinión, cosa que no sé hacer muy bien, pero me vale madres... es mi blog no???

En efecto, el autor (sea quien sea... cuestión que también me vale madres), plantea que en algún momento nos subimos al tren (al nacer), en el que se encuentran seres especiales para nosotros: amigos, papás, hermanos, pareja... y un largo etc.

En el tren de la vida siempre hay gran movimiento de gente, pues en algunas estaciones, ciertas personas bajan y otras suben. Es doloroso ver partir a tus padres, a tus amigos; no obstante, siempre habrá gente nueva en tu vagón.

Sin embargo, hay personas que no bajan del tren, sencillamente se cambian de vagón. Esto suele ser aún más doloroso que los decensos (muertes), pues causa mucha impotencia ver que las personas se alejan de ti aún dentro del mismo tren.

En esos casos, siempre hay la opción de luchar por viajar a ese vagón para: visitar / aclararlascosas / mentarlelamadre (inserte largo etc. aquí) a esa persona, pero claro que siempre existe el riesgo de encontrarte con otro ocupante en el asiento de al lado que *l@ haga feliz... y tengas que regresar jodidamente a tu vagón más deprimid@ que nunca.

Cuando finalmente llega el momento de abandonar el tren en tu estación, será doloroso dejar a tanta gente especial ahí trepada, sin embargo, siempre está la emoción y la curiosidad de saber qué chingaos te espera en tu estación... con cuántos viejos conocidos te vas a encontrar ahí, cuantos abrazos y besos de bienvenida te aguardan... ya llorarán los que se quedan en el tren, pero para tí es solamente el inicio de una nueva etapa.

Realmente me llegó el estúpido mail... y es que, al menos en este momento de mi vida, me identifiqué. Estoy en el vagón en el que no quiero estar, la persona de la que estoy enamorada va en otro, con alguien a su lado que cubre sus expectativas, y me duele saber que no soy yo quien ocupa ese asiento. Sin embargo, estoy dispuesta a viajar a ese vagón, ya no buscando a la pareja, sino la amistad que puede haber entre esa persona y yo... y por qué no?, también con la ocupante del asiento contiguo.

Creo que llegó mi hora de madurar, de crecer y de entender que aunque las cosas no sean como yo quiero, simplemente son como tienen que ser. Llegó la hora de vivir conforme con lo que tengo en mi vagón (aún viendo que hay otros más lujosos que el mío), conforme con la gente que me quiere (que no es por mamona pero es un chingo) y también es hora de luchar por mis metas.

En ocasiones viajaré a otros vagones a visitar a viejos amigos y amores, pero será simplemente eso, una visita; pues sé que al final debo estar feliz en el lugar en el que estoy, porque tengo todo lo que alguien como yo puede necesitar.

*La @ = masculino o femenino, dependiendo del caso de cada lector. (que universal soy no??? merezco un reconocimiento por mi mente abierta, me amo taaaanto!!!).