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domingo, 3 de junio de 2007

Pensando, yo???

Este último mes o mes y medio me la he pasado pensando (pura mamada jajaja pero al fin y al cabo, pensando). Así como la conclusión de hace algunos posts (sí, la de la frasecita pendeja de “si amas a alguien déjalo ir bla bla bla”…), he llegado a muchas otras.

Ahora sé que cada ser humano tiene una manera muy individual de amar, pensar y sentir. Sin embargo, casi todo mundo tiende a darse por vencido muy rápido; yo lo he hecho infinidad de veces… ahora sólo me dedico a luchar por lo que amo.

“Nadie sabe para quién trabaja…” esa sí es una frase muy cierta. Ya dejé de darme de topes por ser quien soy… muchas veces no me corresponden, otras tantas me pesa ser yo misma, sin embargo confío en que algún poder superior compensará todo lo que he dado a los demás (bueno o malo).

Un consejo muy útil (que una persona muy especial me dio alguna vez):

"Al amor de tu vida, ámalo de lejos"

(Eso no significa que tú estés en Polanco y ella (él) en Indios Verdes, tómalo como metáfora)

La confianza es la base de todo, los celos provocan cosas muy negativas… rencor, odio, venganza… y un largísimo etc. Si de verdad amas a alguien, protege ese sentimiento de todo aquello que pueda lastimarlo o destruirlo. Entiende que esa persona tiene un pasado y un futuro… un pasado en el que tú no existías, y un futuro que, de no respetar su pasado, tampoco te incluirá.

Por último, una reflexión medio mafufa pero chida.

Ríe cada vez que puedas,

discúlpate cuando debas hacerlo,

y deja ir aquello que no cambiará.

Besa lentamente... juega duro,

olvida rápidamente,

ama como si fuera tu último día,

toma riesgos, da todo de ti en lo que hagas,

y nunca, nunca te arrepientas.

La vida es demasiado cortapara ser otra cosa que no sea ser feliz.

2 comentarios:

Don Rul dijo...

El domingo es mal día para pensar y reflexionar. Porque luego llegas a conclusiones y éstas se transforman en posturas. Éstas a su vez engendran líneas de acción. Y así, casi sin querer, comienzas a madurar y a converirte en una persona sensata que ya no hace locuras ni estupideces. Hasta que un buen domingo cuando tienes 80 ó 90 años te sientas a pensar y descubres que eso no era lo que querías.




No hagas caso, lo que pasa es que ya me sentí mal de que todo mundo anda muy reflexivo y filosófico y yo escribo puras estupideces. :)

Bada dijo...

Don Rul: Yo quisiera poder escribir puras estupideces... gracias por el comment... besos. (P.D. tu blog logra ponerme de buenas aún en el peor de mis días, por favor, no lo dejes)