Recordando momentos de gran encabrone

Ok, Ok gente... sólo porque ustedes lo piden... había decidido borrar de mi memoria este episodio tan desagradable, sin embargo, por ustedes, creo que vale la pena recordarlo una vez más.

Como ustedes saben (y si no, ps ya lo saben) estuve trabajando en la oficina del esposo de una amiga de mi mamá, me pidieron que les echara la mano porque se les fue su asistente y necesitaban a alguien como yo (ya saben, hermosa, brillante, acomedida y muy pero muy pinche sexy).

Accedí, ya se imaginarán... ahí van la pendeja de Erika a hacer su obra buena del día. Me ofrecieron buena lana, tons tampoco me costó mucho trabajo.

Conforme fueron pasando los días, las cosas se tornaron tensas, descubrí que ambos jefes eran unos patanes, que trataban a sus empleados como si fueran dueños de sus vidas... he aquí sólo algunas de las cosas desagradables que tuve que tragarme por el compromiso:

1. Estar en la oficina desde las 8:25 a.m. hasta las 11:00 p.m. en varias ocasiones, todo para entregar un pinche dictámen online. (y todo porque ninguno de los dos pinches jefes tenía idea de cómo mandarlo, pero aquí está su pendeja, no se preocupen).

2. Recibir reproches porque me fui a las 11:00 p.m. y no hasta las 12:00 a.m. que me habían pedido. (chinguen a su reputísima madre cabrones). Diciéndome por supuesto que mi horario era muuuy limitado y que se notaba a leguas que era una niña.

3. Aguantar vara cuando me mentaron la madre porque les dije que no podía ir el sábado porque tenía que irme a D.F. (Osea... sábado assholes!!! día no hábil!!!).

4. Quedarme callada cuando el pendejo de mi jefe #1 estaba en sus días y me hizo bajar y subir las pinches escaleras 5 veces en menos de 30 segundos para tomar una llamada desde su oficina. Hijodeputa.

5. Aguantar y aguantar y aguantar las mentadas de madre de la Sra. Pilar López, porque con tooodo derecho exigía sus papeles para mandar a la chingada a mis jefes (cosa que yo hubiera hecho gustosa semanas atrás) y ninguno movía un dedo para dárselos.

Pero nada de esto había sido suficiente para hacerme renunciar... todavía hubiera aguantado de no ser porque:

Un miércoles (mi penúltimo día de trabajo), mi jefe #2 me manda a comer a las 2:30 (sabiendo que mi horario es de 8:30 a 4:30) y me dice que me quiere de regreso 4:30 para hacer unos expedientes. Ps ni pedo no??? como que ni mi opinión pidió, tons me fui a comer y ahí estaba yo de regreso a las 4:30.

Tic, tac, tic, tac 4:45... Tic, tac, tic, tac, 5:00... Tic, tac, tic, tac, 5:15 (el pendejo no llegaba y yo sola como dedo en la oficina)...

Se me ocurrió la brillante idea de mandarme un mensaje al Nextel para preguntarle si podía avanzar en algo antes de que él llegara porque tenía una cita a las 7:00.

Por qué no????? llega el imbécil a las 5:30 como energúmeno.

Elpendejodemijefe: Buenas tardes...

Erikaconcaradequépedo: Buenas tardes, te habó Miguel Sevenello de Rústicos Chipilo.

Elpendejodemijefeverdedeenojo: Me vale madres ese cabrón, me puedes explicar tu mensaje???

Erikaintentandoexplicar: Mi..

Elpendejodemijefeinterrumpiendo: A mí ni mi vieja me presiona así, si le hubieras mandado ese mensaje a Rafael, ya te hubiera arrastrado por todo el Circuito interior... para mí lo más importante es mi trabajo, a mí no me salen citas inesperadas a las 7:00 ni dejo de venir a trabajar los sábados, ni me voy temprano de la oficina cuando tengo que entregar un Dictámen sólo porque mi "mami" me está esperando.

Erikaimpacientándose: Carlos...

Elpendejodemijefevolviendoainterrumpir: Yo entiendo que estás chiquita, pero sabes qué? si no te parece mejor vete... más vale de una vez...

Erikamuuuuuyencabronada: ME DEJAS HABLAR!!!???

Elpendejodemijefe: (.)(.)

Erika: gracias... en primera, a mí nadie me arrastra por ningún lado, en segunda, no eres dueño de mi tiempo Carlos, nosotros quedamos en un sueldo y en un horario de trabajo... ustedes no han respetado ninguna de las dos cosas. Mi "mami" como tú dices, vino por mí el martes porque yo se lo pedí, porque ya estaba hasta la madre de la oficina, no por protegerme... tú te fuiste a comer a tu casa como niño bonito y Rafael y yo nos quedamos aquí toooooodo el día. Y pues no... no me parece. Con permiso!!!!

Aventé las llaves de la oficina, el Nextel, le dí una patada en los huevos y salí huyendo.
(Bueeeeno, no fue tan heróico pero de que le dejé sus cosas y me fui ps sí).